Algunos padres veganos o vegetarianos, se plantean cómo comentarles por qué ellos no comen animales a sus hijos, sobrinos…. Sin ser especialmente cruel o profundos sobre el tema.
Sabemos que a veces por miedo a que el niño se desarrolle sano y fuerte, optan por que su hijo sí consuma carne, o por la presión de otros familiares o el médico, no trasladan estos valores momentáneamente a los más peques de la casa… Es un tema realmente delicado y personal sobre cómo educar a un hijo y la nutrición humana.
¿Puede ser un niño vegetariano?
Claro que puede serlo, un dieta bien elaborada vegetariana es mejor que una omnivora sin planificación que es lo que suele ocurrir. Pero venimos para dar una recomendación mucho menos complicado de abordar se trata de un estupendo cuento en donde podemos introducir de forma adaptada a nuestros hijos o sobrino el concepto de vegetarianismo. Se trata del cuento El Sapito vegetarino.
Sinopsis del Sapito Vegetariano
Mamá rana tuvo un sapito muy bonito. Pero Sapito, desde el principio, no comía nada. Su madre, muy preocupada, lo llevó al médico. Sapito seguía sin comer. Por fin un día, Sapito dijo que lo que le pasaba es que no pensaba comerse otros animales, que él era vegetariano. Desde ese día Sapito come hojas, juncos y tomates.
Un cuento económico y que puede ser la excusa perfecta para hablar del tema, desde la lengua del niño hacia conceptos difíciles. Aunque hay muchos niños, que desde los 4 años y con una gran empatía, no quieren comer carne, pues se ponen triste el pensar que son animales muertos ya que descubren el origen del alimento y les produce rechazo, y no hace falta ninguna cuenta para entender esta posición, sino que ellos mismo la ocupan.
Como hemos dicho antes, la respuesta en difícil y en cada familia se optará por obligarlos, engañarlos o respetar su decisión. En el caso que sea, hay que felicitar al niño su decisión crítica, su capacidad empática, y el gesto de amor hacia el mundo que lo rodea.